Él la vio
ello lo miró
sin saber si era real
o solo un sueño.
Él, le pidió su corazón,
ella se lo entregó
en cada amanecer.
Él le regaló
besos que se hacían cortos.
Ella lo buscaba
en cada haz de luz,
en cada nube
y en las gotas de lluvia,
en cada estrella,
en cada sueño.
El quiso ser aire,
aire con olor a azahar
aire para acariciarla,
brisa cálida para envolverla.
Ella le prometió
que no habría
más penas ni olvidos.
Él le regalo
sentimientos de luz,
un corazón para vivir
y un alma para quedarse.
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Mi Libro de poesías: "La vida me sorprende": E editorial ArtGerust : La vida me sorprende
Precioso, com para no irse de aquí,. Un beso.
ResponderEliminarQue hagan la película ¡ya!
ResponderEliminar;)
EliminarGracias Amapola
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