Me he perdido
en tus sábanas revueltas.
Me he perdido
en cada poro de tu piel,
en tus caricias, en tu boca,
en cada beso, en cada suspiro.
Me he perdido en tu cintura,
en el ritmo que marcan tus caderas,
en el cielo al que me haces subir.
Me he perdido, bailando
al son de canciones
inventadas para mi.
Me he perdido en tu sonrisa
en las palabras que me regalas.
Me he perdido en tú placer.
Me he perdido muy despacio
y no me quiero encontrar
Cadencia al vaivén suave del ser y estar.
ResponderEliminar